lunes, 19 de julio de 2021

 

EJERCICIO PARA UNA LECTURA ORANTE DE LA BIBLIA

 

PRIMERA PARTE: Contacto con el texto escrito.

Un miembro del grupo proclama el texto en voz alta, los demás siguen la lectura leyendo o escuchando atentamente.

 

(aproximadamente 3 minutos) Durante este periodo todos leen el texto otra vez en silencio, dándose cuenta de una(s) palabra(s), frase(s) o versículos que les impacta o sorprende.

 

Cada miembro del grupo menciona la palabra, frase ó el versículo, indicando donde se encuentra en el texto (p. e. “Me impacto la palabra o expresión ... en el versículo, pero sin dar razones o explicaciones.” ),

 

El mismo texto será leído otra vez por otro miembro del grupo. Los demás, escuchan atentamente o siguen leyendo el texto en silencio.

 

SEGUNDA PARTE: Del texto escrito a la palabra viva.

(aproximadamente 5 minutos) Durante este periodo escuchemos atentamente la voz del Señor, preguntándonos que quiere decirme personalmente.   Para mi vida propia y concreta.

 

Compartir lo que hemos escuchado como Palabra de Dios en el fondo del corazón. Lo hacemos a nivel personal en primera persona del singular.  (yo, me, mi, etc., evitando expresiones impersonales sin escondernos detrás de nosotros, nos, nuestro... Se trata de un compartir sencillo no de una discusión, ni de una predicación moralista.)

 

TERCERA PARTE: La Palabra requiere una respuesta.

El mismo texto será leído otra vez por otro miembro del grupo. Los demás escuchan atentamente o siguen leyendo en silencio.

 

(aproximadamente 5 minutos) Durante este tiempo procuraremos dar una respuesta personal a la Palabra de Dios. Debe haber una correspondencia entre la palabra y la contestación; de lo contrario no podemos considerarlo una respuesta.

 

Expresamos la respuesta personal de corazón, en voz alta en el grupo, para que este pueda afirmar y confirmar nuestra oración con un AMÉN

 

CONCLUSIÓN:

Invitación a terminar el ejercicio con una oración de agradecimiento, petición o intercesión.

 

PASTORAL DE CATEQUESIS

Arquidiócesis de Cali

viernes, 21 de mayo de 2021

 LA NOCHE QUE NO QUIERO

Llega la noche, una noche oscura y tenebrosa

Unos en sus casas de pisos altos y muebles abullonados

Y otros en sus barricadas de pisos altos y piedras puntiagudas

Unos pidiendo destapar su vía al súper o su club

Y otros pidiendo desbloquear la corrupción

Para ver a sus vástagos crecer en dignidad.

 

Llega la noche, una noche oscura y tenebrosa

unos en sus casas con calculadora en mano haciendo

cuentas de su emprendimiento en medio de la huelga

y otros con monedas en manos viendo si alcanza

para llevar arroz y huevo a su familia que en casa espera

 

Llega la noche, una noche oscura y tenebrosa

Una noche que oscurece los derechos de unos y de otros

Una noche que los cubre con su manto desigual

En la pesada penumbra de sus pensamientos

Para despertar a la lucha diría de conseguir sustento

 

Llega la noche, una noche oscura y tenebrosa

Una noche que despierta con la nota roja de la muerte

La nota roja que desaparece en la tinta de los diarios

Para colarse en las estadísticas del valor de la divisa

Que no se creció por culpa de los vándalos

 

Llega la noche, una noche oscura y tenebrosa

que se levanta encontrando a unos y a los otros

en la calle que el carro encuentra abarricada

y al lado de ella un puñado de jóvenes que gritan

que el arma expuesta contra su vida

salió por la ventana ahumada que vomito el plomo

 

Llega la noche, una noche oscura y tenebrosa

que encuentra al empresario con sus saldos en rojo

y busca en sus notas al empleado despedido

para encontrar en ellas una respuesta que se esquiva

por parte de mandatario que una vez le prometió salida

 

Llega la noche, una noche oscura y tenebrosa

Y en la Casa de Nariño la bombilla no se apaga

Se leen las demandas, y los pliegos y denuncias

salen en la oscura noche las ordenes milicas

y se envalentonan los uniformes en la calle

suenan entonces los chasquidos por doquier  

y la madre con un sobresalto se levanta

pensando en su vástago valiente que no llega

 

 

Llega la noche, una noche oscura y tenebrosa

Unos dicen que es válido defender tus derechos,

pero jamás pisoteando los de los otros

lanzan de aquí y de allá una que otra diatriba

pero no se encuentra el término medio

que defina la convivencia que se hace esquiva

 

Llega la noche, una noche oscura y tenebrosa

dónde encontrar la luz  en medio de la noche

si las estrellas saltan alrededor de la hermosa luna

y las nubes más negras que la noche misma

se ciernen por los barrios de tejados blanquecinos

o de techos roídos por el sol de eternidades

 

Llega la noche, una noche oscura y tenebrosa

Y el sol del nuevo día parece perezoso en su salida

Angustia, dolor, muerte y poca, poca empatía

Se vive en los corazones que luchan día a día

Unos en sus casas de pisos altos y muebles abullonados

Y otros en sus barricadas de pisos altos y piedras puntiagudas

 

Llega la noche, una noche oscura y tenebrosa

Y ambos en sus realidades se enfrentan azarosos

juntos entenderán que esta lucha no es de clases

Y juntando sus ganas y riquezas, avanzarán victoriosos

Vislumbrando un nuevo estado de justicia equitativa

que entregue la paz que ha sido esquiva en esta noche,

noche oscura que se viste de verde, verde que es vida.

 

 

 

 

martes, 11 de mayo de 2021

LA MUJER UN APOSTOLADO QUE CONSTRUYE IGLESIA

 LA MUJER UN APOSTOLADO QUE CONSTRUYE IGLESIA

La dignidad de la mujer y su vocación, objeto constante de la reflexión humana y cristiana, ha asumido en estos últimos años una importancia muy particular. Esto lo demuestran, entre otras cosas, las intervenciones del Magisterio de la Iglesia, reflejadas en varios documentos del Concilio Vaticano II, que en el Mensaje final afirma: «Llega la hora, ha llegado la hora en que la vocación de la mujer se cumple en plenitud, la hora en que la mujer adquiere en el mundo una influencia, un peso, un poder jamás alcanzados hasta ahora. Por eso, en este momento en que la humanidad conoce una mutación tan profunda, las mujeres llenas del espíritu del Evangelio pueden ayudar tanto a que la humanidad no decaiga». Las palabras de este Mensaje resumen lo que ya se había expresado en el Magisterio conciliar, especialmente en la Constitución Pastoral Gaudium et spes y en el Decreto Apostolicam actuositatem, sobre el apostolado de los seglares.

 

Tomas de posición similares se habían manifestado ya en el período preconciliar, por ejemplo, en varios discursos del Papa Pío XII y en la Encíclica Pacem in terris del Papa Juan XXIII[1]. Después del Concilio Vaticano II, Pablo VI expresó también el alcance de este «signo de los tiempos», atribuyendo el título de Doctoras de la Iglesia a Santa Teresa de Jesús y a Santa Catalina de Siena, y además instituyendo, a petición de la Asamblea del Sínodo de los Obispos en 1971, una Comisión especial cuya finalidad era el estudio de los problemas contemporáneos en relación con la efectiva promoción de la dignidad y de la responsabilidad de las mujeres. Pablo VI, en uno de sus discursos, decía entre otras cosas: En efecto, en el cristianismo, más que en cualquier otra religión, la mujer tiene desde los orígenes un estatuto especial de dignidad, del cual el Nuevo Testamento da testimonio en no pocos de sus importantes aspectos (...); es evidente que la mujer está llamada a formar parte de la estructura viva y operante del cristianismo de un modo tan prominente que acaso no se hayan todavía puesto en evidencia todas sus virtualidades.



[1] Encíclica Pacem in terris del Papa Juan XXIII

lunes, 3 de mayo de 2021

 

EXORCISMO CON LAS LETRAS

 

Exorcizar el alma con las letras

Calmar el corazón con la lluvia

Lluvia que cae desde los ojos

Por un estado que es indolente,

Por un policía que mata al ciudadano

 

Exorcizar el alma con las letras

Por tantos y buenos jóvenes caídos

Vidas que se alzan en protesta

Por un país que los masacra

Los masacra violando sus derechos

En la vida diaria y en la lucha desarmada

 

Exorcizar el alma con las letras

por tantos buenos ciudadanos

que se suman a que el soldado

use sus armas ante quien no las tiene

son buenos bajo sus techos termo acústicos

que los aísla de sus hermanos, los pobres

 

Exorcizar el alma con las letras

Mientras la lluvia que cae de los ojos

Llega al estómago vacío del vecino

que no tiene nada en la alacena

y que ahora llora a su hijo que protesta

 

Einer, Jovita,  Miguel y Marcelo

Mauricio, Jeison, Edwin y Andrés

Santiago, Nicolás  y los N.N.  reposan

en la paz del corazón del que disparo

son los nombres que ahora no olvidare

y que atizan el fuego de la indolencia

en medio del humo lacrimógeno que veré

 

La chica que fue violada y los muchos heridos,

los empresarios que inician de nuevo

La madre que queda sin su hijo

La esposa que ya no verá su amado

reposarán en el corazón tranquilizado

De quien desde la red sigue pidiendo fuego

Hacia el pueblo que lucha sus derechos

 

Que así no se hace patria

Que la lucha debe ser pacifica

Que Jesús, Martin, o Mahatma

Que a mí eso no me toca

Que son manada de vagos

Que asi no lo lograran

Son las voces de indolentes

Que su Dios no aceptara